El bordado con soutache se lleva utilizando desde el siglo XVIII en la decoración de trajes de época y uniformes sin embargo, su uso ha ido evolucionando y actualmente se utiliza para embellecer trajes de novia, trajes de fiesta, mantos, velos, alta costura, incluso ropa de cama, y ahora, además, en bisutería.
En la bisutería consiste en envolver con el cordón trenzado piedras semipreciosas o de bisutería y cuentas de distintos tamaños y colores, a modo de engastado. El cordón se va cosiendo con puntadas invisibles de forma que las piedras y las cuentas quedan sujetas.
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